En 2003 se fundó la bodega, ubicada en la antigua cooperativa de Marcà, un edificio dedicado a la elaboración de vinos desde los inicios del siglo pasado. Esta bodega emergente del Montsant destaca por su trabajo con las variedades históricas de la zona: garnacha y cariñena. Los vinos son sutiles, fragantes y complejos, y toman su nombre (Brunus y Santbru) del fundador de la orden monástica de los monjes cartujanos, San Bruno de Colonia, presentes en la comarca del Priorat desde 1194 y que fueron los impulsores del cultivo del viñedo.