El abuelo de Oriol Fàbregas elaboraba y vendía vino a raudales a otras bodegas elaboradoras; desgraciadamente tubo que cesar la actividad en los años 80, por la entrada las nuevas regulaciones de sanidad que impedían elaborar directamente dentro de los lagares de cairons. Entonces empezó a vender la uva.
Toda la familia es de origen viticultor; el abuelo y su padre le han sabido transmitir la pasión por el viñedo i Oriol decidió restaurar la bodega para poder elaborar las microvinificaciones, de vino tranquilo y espumoso, de gran calidad con los mejores viñedos viejos de la propiedad. El local contiene 25 lagares caironados de distintas medidas, construidos entre les años 1940 y 1960. Actualmente hay 9 de restaurados y han sido reconvertidos en salas de crianza y guarda.
La bodega es visitable i es un portal al pasado, donde poder disfrutar de una visita, cata y la filosofía de Oriol, un viticultor que elabora vinos a la bodega urbana ubicada dentro del municipio de Vilafranca del Penedès i representa un espacio único en su especie.