La historia de la D.O. Rueda está ligada a la variedad Verdejo y por eso mismo Bodegas Naia decide instalarse en 2002 en La Seca, en pleno corazón de Rueda, con el propósito de sacar el máximo partido al clon original de la Verdejo. Desde el principio, ha basado su trabajo en una selección de cepas viejas de la autóctona Verdejo, plantadas en vaso y ha tratado siempre de conseguir unos vinos con la autenticidad que da un trabajo riguroso en la viña. Convertida en tan poco tiempo en una marca de referencia en defensa de la Verdejo, Naia reproduce el modelo de los grandes blancos del planeta, vinos frescos pero también amplios, sabrosos y con carácter.